Cadaver exquisito: Juego al juego por el juego mismo
El aire cargado la perfumaba con un aroma rancio y arcaico, envolviendo su silueta esquiva, tan esquiva como las estrellas que se evaporan al ver aparecer la luz del día, se desvanecían entre sus pasos sus dudas. Huyendo de si misma, no podía evitar escuchar el rumor del mar tembloroso como su alma, recriminándole sus harapos fabricados con hilos de vergüenza, ribetes de suspiros y pliegues de sollozos añejos... Ahora, mientras ella remueve el potaje y yo la miro, sé que esta vez he perdido. Pude elegir enredarme en las manos expertas de esa otra mujer, que manipulaba diestramente a los que me rodeaban, pude elegir no caer preso en la cárcel de cristal con sólo rodar en otro sentido, pude elegir mirar para otro lado cuando ella se fijó en mí entre todos los demás. Pude huir, pero no lo hice, jugué mis cartas, la elegí a ella… pero he sido un garbanzo estúpido, ella sólo quería cocinarme.
Estoy retumbada en la arena, levanto mi brazo, busco formas y dibujo figuras que me regala el viento. ..quisiera ser tan alta como la luna, como la luna, y pasar por el puente de tu cintura y de Málaga vengo de servir a mi rey y también se me cayó el anillo dentro del agua, y al sacar el anillo saqué un tesoro y en el tesoro encontré la moneda que me pidió el barquero y con ella pagué un boleto para el juego... Aprenda a jugar, juegue a vivir,… Quedé fascinada con las alas del dragón, ese que se ríe viendo como lo recorro con la punta de mi dedo. De niña jugaba al rueda rueda mientras cantaba una canción tonta sin más finalidad que la de dar vueltas alrededor de la nada… sintiendo una enorme satisfacción en el empeño de girar hasta el mareo y el vértigo. Por eso me gustan poco los juegos donde el fin último es ganar algo o vencer al enemigo… porque entonces deja de ser un juego para convertirse en el trabajo sin fin de cada día… con todo su montón de sinsabores, sus tejemanejes, sus frustraciones…
Tengo los dedos metidos, enredados, en esta maraña que llamas pelo, jugueteo buscando uno de tus ojos, me dijiste que habría premio si conseguía ver el color de tus pupilas... navego a ciegas, el tacto, el gusto y el olor mis aliados, empiezo a entender tus reglas, te haces grande a media que te recorro. Estoy apunto de perder los papeles, voy a volcar mis fichas, a soltar un renuncio, me pierdo, insomne entre cada uno de tus huecos, te estremeces y empiezo a entender que era un juego, una excusa, y que los juegos hay que disfrutarlos de principio a fin, no importa quién gane o pierda, aunque ahora mismo estemos ganando/vencidos los dos... Caos: te invoco, te llamo, te grito, te ne-ce-si-to!!! Ya ves, no es fácil vivir en un lugar que es redondo pero parece plano; que gira pero parece estar quieto. Te acostumbras finalmente, pero terminas registrando mejor el mapa que el territorio. Y no es la idea. Por eso, Caos, quiero que vengas de una vez, me soples en la cara, y cuando yo cierre los ojos, aparezcan tus huellas desprolijas para poder seguirlas un poco, y perderme, y así entonces encontrarme. Esto te lo digo en serio, no creas que es un juego, ok-? …Es mentira y verdad, es verdad y es mentira. He vuelto a caer en la tentación. Me inclino ante los ganadores pacientes, ante los pacientes que no temen al tiempo, tal vez porque éste no tiene sentido para ellos, tal vez porque se toman todo el del mundo. Supongo que mi debilidad ante las tentaciones, tan simples, se debe a que no tengo conciencia de estratega. Que sean ellos los que jueguen, sólo soy un instrumento. Me adapto al ritmo. La locura ahora son tentaciones, mientras caigo en tentaciones simples. Y llego a mi por casualidad, silencioso lleno mi alma de incertidumbre, hurgo en mi mente la desestructuro y yo lo deje... logro convencerme. Usó lenguaje que no comprendía, voló mi mente que estaba vacía, mas el me brindaba libertad absoluta con esa propuesta siniestra de jugar por jugar. Me río... suspiro, me siento insegura.. mis ojos se ciegan, se niegan, se nublan, las manos y el alma se conjugan mas no logro imaginar el final. Pero fue tanto lo que he absorbido de uds. que me atrevo y comienzo a jugar por jugar. Justo entonces su salida fue como una huida hacia adelante. No se giraba a mirar el pasado, imperfecto, perfecto o pluscuamperfecto. No importaba cuál fuera éste ni cuáles fueran los demonios que tan extrañamente andaban en su persecución. No había posibilidad de cambio, ni voluntad de ello. Los otros miraban atónitos, y no hacían sino repetir en tétrica letanía unas palabras casi imperceptibles, pero terrible y admirablemente hirientes, punzantes. Se clavaron los ojos de los unos en las pupilas de los otros y ya no pudo haber otra opción: seguir huyendo. Acabo de vendarte los ojos para tomar tus manos, que infinitas, recorrerán la forma de mis ojos... el perfil de mis labios... la suavidad de mis pechos... mis pezones erizados... mi monte poblado... mi humedad sedienta... y en este momento he soltado mis manos para sentirte erecto... para sentirte humano... El circulo de café en mi libreta, tu sonrisa, jugarnos la cerveza a piedra papel tijera, tocar fondo para impulsarte con los pies desde el suelo hasta el cielo, llorar, reír, todo es cíclico, estrategias, corazas, corazones abiertos en canal tan solo es eso... el juego al juego por el juego mismo...de poder encontrarte algún día al lado derecho de la cama y perder así.. la cuenta de los días en los que yo.. estaré al lado izquierdo de la tuya. Detente peregrino, caminante, vagabundo, bloguero o bloguera, tal vez ficha verde del juego de la oca... Descansa en esta estación; respira y medita. Mira a tu alrededor: es un lugar nuevo. Disfruta de hoy y no pienses en la meta. Camina el camino por el camino mismo. Cada paso es un triunfo y cada remanso un regalo. Ahora es siempre. Y después... continúa tu camino. ¿¡es que no pensás detenerte nunca!? ¿a qué le tenés miedo, lobizón, a los aullidos de los bostezos, cuando el camino esté detenido, o cuando esté desierto? mirá a tu alrededor (mentón en hombro izquierdo, mentón en hombro derecho, así... así... ¡muy bien lobizón!), y encontrarás que después del aburrimiento viene el sueño, y en verdad te digo que un buen sueñito vendría bien, ¿verdad? vamos, lobizón... cerrá esos ojitos tan grandes que tenés, y esa boquita tan grande que tenés; andá lobizón, ponete las pilas, bacalao... Todo inició como una Catarsis tiempo atrás. Visitando a Fer mil veces me hice la pregunta y no encontré la respuesta que buscaba. Será la adrenalina que recorre por mis venas lo que me impulsa a continuar? Solo se que el placer de estar ahí, rodeada de tanta gente me lleva a seguir adelante. Cuanto tiempo más? No lo sé... tal vez hasta que ya no tenga fuerza en mi espíritu para seguir realizando todo lo que amo. De pronto una visión llega a mi mente: buscar el camino a Eneta..... Quizá la guerra, como la muerte misma, sea parte esencial de la actividad Humana. No honramos a los muertos porque nos hayan enseñado a acabar con la guerra para siempre, sino por algo más simple y conmovedor; ellos murieron porque lo pedimos. Las tumbas de nuestros soldados, son su terreno sagrado, el santuario al que los vivos sin reposo acudimos para tratar de comprender el significado de su muerte y el dolor de nuestras acciones, un pensamiento se eleva a modo de oración, en pos del que se ha ido... Se que no te gusta descansar, tu siempre andas atareado en tu infinito recreo. Pero deja que te cuente un secreto. Cuando era muy chico me regalastes el sonido de las canicas, el bailoteo de la peonza y las locuras del yo-yo. Pensarás que es poco, pero esa gracia tuya impregnó mi sangre de por vida. Toda mirada se queda corta si no te lleva del brazo amigo, la vida no sería vida si no tuviese los colores con que la iluminas, pero no te detengo más, no pares amigo, sigue con tu recreo. Suelta mis manos que necesito ser libre. Cuando me des la espalda y vayas a dormir tu sueño enfermo, pienso reunirme con los niños para jugar. Escribiremos palabras que nunca entenderás, hablaremos de paraísos que nunca visitarás, nos reiremos de todos vosotros que permanecéis en la oscuridad y cantaremos canciones de la tribu a la que pertenecemos. Por el placer de sentir un intenso cosquilleo al compartir la experiencia con desconocidas almas. Puras esencias, sin rostro al que asignar, que atesoraría en diminutos frascos de vidrio para poder disponer de ellas completando así mi parte más imperfecta. Por el placer de sentirme pieza de un inmaterial rompecabezas, en espera de saber si las bordes estarán lo suficientemente limados como para encajar de algún modo, como lo hacemos formando parte de sociedades imperfectas… Jugar por jugar, participando con la infinita sabiduría y la inocencia de los niños, que carecen de la preocupación por quedar bien ante los otros. Porque lo trascendental será unir fuerzas para divertirnos. No importa ganar, no importa perder, pues finalmente lo que más disfrutamos es ese mar interior que recorre cada rincón de nuestros cuerpos cuando el juego va llegando a lo más interesante... atesorando y grabando en nuestra memoria cada momento, cada rincón, cada imagen… Juego divertido es juego recordado, juego aburrido es juego al olvido. Una brisa, una luna, unas botellas, un mensaje de tu boca, un mensaje de mis manos, un juego limitado, un juego inacabado a pesar de haber terminado. Un corte parte el corazón un detalle lo cose, un sueño lo mueve, una realidad lo marea, la viva en si misma lo sostiene. Juguemos a vivir en el infierno de los cielos. Juguemos a morir en el cielo del infierno. Juguemos y sabremos que no perdimos el tiempo bajo un gris desafino. Sabores, colores, amores, sal, sol, asfalto o mar....que más da, el caso es jugar...juega con palabras, juega con miradas, juega con el balón o con el camión, pero juega. No más miedo a los niños, démosles cariño y menos prohibiciones, por favor, ellos lo agradecerán aprendiendo por ellos mismos a ser felices. ¿Podéis juzgar que me meta en él? Resulto entonces atrapado en éste juego ¿Qué decida continuar? que no resulta más serio que juego alguno ¿Qué me precipite a salir?, pero tampoco menos. Nada sé de lo que me antecede y a los ojos horizonte alguno se explaya mostrando un final. ¿Qué soy que no sea náufrago entre tanta palabra que me atropella y que casi soy yo mismo la palabra que me atropella y entonces se pregunta qué palabra soy para atropellar a éste que así piensa mientras el juego marcha y no cuenta se da de que la marcha lo va a dejar ¡Mejor que se corte la cabeza! JUGAR es una de las primeras formas de aprender mientras crecemos. Es decididamente la mÁs divertida. Como WendyS frustrados vamos perdiendo esa capacidad conforme nos hacemos más grandes y no muchos mantienen a sus PeterPan alertas, y entonces nos transformamos en adultos aburridos... Los momentos de JUGAR son máGicoS, maravillas de felicidad que deberíamos poder encontrar más seguido... Eran palabras que revoloteaban en un vaho verde, jugaban a ser mariposas de cenizas achicharradas en un badil. Se sentían juguetonas tras haber huido del mundo de papel, dibujaban espirales sobre los ecos duros y diáfanos, querían ser hijas del sol. Eran blandas al mantenerse regias ante su enemigo el céfiro, que corría lento sobre la lumbre. Las lanzaba a empujoncitos, frenándolas en su baile, el hogar quería vomitarlas no podía contener tantas voces.